Prueba del líder en Gran Hermano Chile

Semana 1: Ping pong semicircular

Durante la primera semana, los concursantes se enfrentaron en un desafío que se dividía en dos fases. Inicialmente, se dividieron en tres tandas en una etapa clasificatoria, donde la tarea era transportar cinco pelotas de ping pong por una estructura semicircular. Luego, debían deslizar esas pelotas por dos largos tubos para embocarlas en recipientes situados en el extremo inferior. La etapa final, en la que participaron Jorge, Ariel y Alessia, tenía la misma dinámica, pero con la complejidad añadida de tener que transportar siete pelotas en lugar de cinco.

Semana 2: Carrera de equilibrio contra el muro

La prueba de esta semana puso a prueba las habilidades de equilibrio y destreza de los participantes. De forma individual, tenían que desplazar una pelota utilizando dos cuerdas y hacerla pasar por un muro lleno de agujeros hasta llegar a la meta. En la etapa final, la dificultad aumentó, ya que debían trasladar 10 pelotas en el menor tiempo posible. Jorge, Fernando y Hans fueron quienes compitieron en esta fase.

Semana 3: Camino de tablas y la bola encestada

Al igual que en la semana 1, los jugadores se dividieron en tres tandas clasificatorias. El desafío aquí consistía en armar un camino con tablas sobre una viga metálica para luego impulsar una bola por él. La final de esta semana la protagonizaron Viviana y Hans.

Semana 4: Atrapada y apilada con la cinta mecánica

En esta ocasión, la prueba desafió la paciencia, ingenio y resistencia de los participantes. La tarea era atrapar y apilar cajas que descendían de una cinta mecánica, utilizando el propio cuerpo como soporte. En la fase final, Jorge, Constanza y Francisco se enfrentaron en una competencia igualmente desafiante.

Semana 5: Dúos en equilibrio con el palo oscilante

El desafío de esta semana involucró la cooperación entre los participantes. En duplas, tenían que transportar 10 pelotas utilizando un palo como equilibrio. La prueba tuvo la particularidad de coronar a dos líderes en lugar de uno. En la final, se enfrentaron las duplas de Rubén y Skarleth contra Jorge y Lucas.

Semana 6: Torres de bloques de 3 metros

Esta semana, el objetivo era construir una torre de bloques que superara los 3 metros de altura. Viviana y Francisca, quienes fueron las más rápidas en sus respectivos grupos, compitieron en la final con el mismo desafío.

Semana 7: Pelotas en pedestales sobre plataforma inestable

El juego de esta semana desafió la destreza y equilibrio de los concursantes al tener que colocar pelotas sobre pedestales en una plataforma inestable. La competencia final vio enfrentarse a Alessia, Viviana y Lucas.

Semana 8: Rompecabezas gigante

Los concursantes tuvieron que demostrar sus habilidades de lógica y resolución al armar un rompecabezas gigante con la imagen de Gran Hermano. Trinidad y Alessia fueron las más veloces y se enfrentaron en la fase final.

Semana 9: Carrera contra la pendiente

El último desafío antes de la gran final consistió en un circuito en pendiente. Los participantes tenían que subir y bajar rápidamente para evitar que las bolas que liberaban cayeran al suelo. Francisca, Hans y Lucas fueron quienes llegaron a la final, enfrentándose en una prueba similar.

Semana 10: Equilibro en la hamaca

La décima semana llevó a los participantes a un terreno complejo de coordinación y equilibrio. La prueba se dividió en una etapa clasificatoria y una etapa final. En la primera, los concursantes debían trasladar siete cubos de un extremo a otro de una viga. Al llegar al final de la viga, los jugadores encontraban una hamaca en la que debían apilar los cubos y mantenerlos en equilibrio durante 5 segundos. Pero había un giro: tenían que sostener unas cuerdas que controlaban el movimiento de la hamaca. Finalmente, Raimundo, Constanza y Jorge avanzaron a la etapa final, donde la prueba se intensificó con un octavo cubo y un tiempo límite de 20 minutos. El ganador sería quien lograra apilar todos los cubos en el tiempo establecido o, en caso contrario, quien tuviera más cubos apilados.

Semana 11: El desafío de los cubos

La undécima semana se destacó por un giro especial, ya que además del liderazgo, los concursantes podían ganar CL$ 8,000,000. La primera parte de la prueba requería una enorme resistencia física y mental: los participantes debían permanecer atados con una soga a un cubo gigante durante el mayor tiempo posible. Quienes se soltaran quedarían automáticamente eliminados. Después de ciertas horas, determinadas por una sirena de Gran Hermano, los finalistas fueron anunciados. En la etapa final, los concursantes enfrentaron un desafío aún no revelado que pondría a prueba sus límites una vez más.

Semana 12: Enrolla y desenrolla

La duodécima semana trajo un reto físico de velocidad y destreza. Los participantes comenzaron enrollando en su propio cuerpo una soga que provenía de un enorme carretel. Tras esto, se movieron al extremo opuesto para desenrollar la soga. El desafío se llevó a cabo en tandas de cuatro competidores, con Alessia y Raimundo destacándose como los vencedores de sus respectivos grupos. En la fase final, estos dos jugadores se enfrentaron nuevamente en el mismo reto, determinando al campeón de la semana.

Semana 13: El tesoro escondido

El inicio de esta prueba llevó a los concursantes en una búsqueda frenética de monedas ocultas en distintos rincones de la casa. Alessia, Federico, Ignacia, Constanza y Jorge demostraron ser los más astutos, pasando a la siguiente fase. En esta segunda etapa, su habilidad y rapidez fueron puestas a prueba en la Arena de Juegos, donde enfrentaron el reto de abrir tres cajas fuertes utilizando un manojo con 15 llaves aleatorias. Su objetivo era conseguir un preciado lingote de oro antes que sus contrincantes.

Semana 14: El equilibrio de la cocina

En una prueba que combinó destreza y paciencia, los concursantes se dividieron en tres grupos para enfrentar el desafío de construir una torre usando elementos de cocina. Sin embargo, el verdadero reto residía en que la base era inestable, lo que añadió tensión y dificultad. Los que lograron mantener sus torres estables por 5 segundos (Hans, Ignacia y Jorge) avanzaron a la final, donde enfrentaron una vez más el mismo desafío.

Semana 15: Tarimas en ascenso

Esta semana, el desafío puso a prueba el equilibrio y la resistencia de los participantes, pero con un giro: debían trabajar en parejas decididas por sorteo. La primera parte los llevó a tres tarimas de creciente altura, donde debían permanecer en equilibrio, pasando de una a otra. Solo las dos parejas que demostraron mayor destreza (Catalina y Francisco, Jorge y Raimundo) avanzaron a la siguiente fase, donde enfrentaron una variante del mismo desafío. Finalmente, Catalina y Raimundo, como pareja finalista, enfrentaron el último reto de forma individual.